En una reciente entrevista con Radio Milenium, Mario Grinman, presidente de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), defendió el rumbo económico del gobierno de Javier Milei y aseguró que el tipo de cambio actual “no está atrasado”. Además, destacó que el mandatario fue claro durante su campaña al no prometer mejoras inmediatas en el consumo, sino un camino de “sudor y lágrimas”.
Grinman explicó que el 2023 fue un “año anabólico” debido a la inflación descontrolada, que llevó a los argentinos a stockearse comprando desde autos hasta latas de atún. Sin embargo, según datos de la CAC, el consumo masivo mostró un leve repunte a principios de 2025, aunque en julio registró una caída interanual del 0,8%. A pesar de esto, el dirigente afirmó que el sector comercial no ha experimentado una disminución en el número de empresas ni en el empleo, ya que los cierres de negocios fueron compensados por nuevas aperturas. “Hoy los empresarios deben ganar por volumen, no por vender una camisa y vivir de eso todo el mes”, señaló, destacando un cambio cultural en el sector.
El titular de la CAC también criticó la presión fiscal “descarada” de las provincias, acusándolas de imponer “aduanas internas” a través de impuestos como Ingresos Brutos, además de las tasas municipales. En relación con la apertura de importaciones, que ha generado preocupación por su impacto en las ventas locales, Grinman relativizó el problema al señalar que Argentina sigue siendo el tercer país más cerrado del mundo y que los productos importados son una práctica habitual a nivel global.
En el plano político, Grinman apuntó contra el kirchnerismo, acusándolo de intentar “destruir el equilibrio fiscal” con iniciativas legislativas como el aumento de jubilaciones, con el objetivo de desestabilizar al gobierno y recuperar el poder. “Quieren pegar un misil bajo la línea de flotación del gobierno”, afirmó, refiriéndose a las recientes leyes aprobadas en el Congreso.
Por otro lado, el empresario relató un cruce con el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, por una cautelar presentada por el Instituto Argentino de Capacitación (INACAP) tras la eliminación de aportes obligatorios a cámaras empresariales. Grinman aclaró que la acción no fue impulsada por la CAC, sino por INACAP, un ente autónomo, y subrayó: “Le dije a Sturzenegger que él haga su trabajo y yo el mío”.
Grinman también condenó los actos de violencia política, como el lanzamiento de piedras contra Milei, comparándolos con el “cajón de Herminio” del peronismo en 1983. “Eso no es democracia, es salvajismo. Hay que cuidar la democracia, no importa la ideología”, enfatizó.
Con un respaldo firme al modelo económico de Milei, Grinman destacó los logros en la reducción de la inflación y el equilibrio fiscal, aunque reconoció los sacrificios que implica este camino. “El 2023 fue un año donde los empresarios ganaron con manejo financiero, no con ventas. Hoy, el desafío es adaptarse a un nuevo contexto para impulsar el crecimiento”, concluyó.