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1-septiembre-2025 HOY

Militantes kirchneristas atentaron contra la vida del Presidente

El Gobierno arremete contra el kirchnerismo por el ataque en Lomas de Zamora y eleva la tensión electoral
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En un contexto de creciente polarización política en Argentina, el Gobierno Nacional, encabezado por el presidente Javier Milei, atribuyó al kirchnerismo la responsabilidad de un violento incidente ocurrido durante una caravana electoral en Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires. El ataque, que obligó a suspender la actividad y evacuar al mandatario junto a su comitiva, ha sido interpretado por el oficialismo como una maniobra deliberada de la oposición para desestabilizar la campaña de La Libertad Avanza (LLA) de cara a las elecciones legislativas provinciales del 7 de septiembre y las nacionales del 26 de octubre.
 
Este episodio ha intensificado las fricciones entre el gobierno y el kirchnerismo, profundizando la polarización electoral en un momento clave para la política bonaerense.El incidente en Lomas de ZamoraLa caravana presidencial, que recorrió la avenida Hipólito Yrigoyen en Lomas de Zamora, tenía como objetivo fortalecer la presencia de La Libertad Avanza en el segundo municipio más poblado de la Tercera Sección Electoral, un área clave para los comicios.
 
Acompañado por su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei y el diputado José Luis Espert, el Presidente saludaba a simpatizantes desde una camioneta blanca cuando un grupo de manifestantes comenzó a arrojar piedras y botellas contra el vehículo. La situación escaló rápidamente, lo que llevó a las fuerzas de seguridad a evacuar de urgencia al jefe de Estado y a los demás integrantes de la comitiva.
 
Según testimonios, el clima comenzó a tornarse hostil hacia el final del recorrido, tras un trayecto inicial de apoyo masivo y euforia. José Luis Espert, candidato a diputado nacional por LLA, relató que “cayeron piedras muy cerca del Presidente, de Karina y de mí. Se puso muy violento, y por seguridad decidimos terminar el evento”. El diputado, quien tuvo que abandonar el lugar en una motocicleta escoltado por un militante, señaló directamente al kirchnerismo y al intendente local, Federico Otermín, como responsables políticos del ataque, acusándolos de recurrir a la violencia ante la falta de argumentos.
 
El operativo de seguridad logró detener a dos personas en el lugar: una fue liberada tras ser aprehendida por arrojarse sobre la camioneta presidencial, mientras que otra permanece bajo custodia por atentado a la autoridad. No se reportaron heridos, pero el episodio generó una fuerte reacción en el oficialismo, que lo interpretó como un intento de intimidación orquestado por sectores opositores.Reacciones del oficialismo.
 
El presidente Milei, ya seguro en la Quinta de Olivos, se pronunció en su cuenta de X: “En Olivos con el profe José Luis Espert y el jefe Karina Milei, luego del paso por Lomas de Zamora, donde los kukas tira piedras, carentes de ideas, recurrieron otra vez a la violencia. El 7/9 y el 26/10 digamos en las urnas Kirchnerismo Nunca Más”.
 
Este mensaje, acompañado de una foto con Espert y Karina Milei, reforzó el lema de campaña de LLA, que busca capitalizar el rechazo al kirchnerismo en los próximos comicios. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, candidata a senadora por la Ciudad de Buenos Aires, fue una de las voces más contundentes: “El kirchnerismo organizó un ataque al Presidente en Lomas de Zamora, poniendo en riesgo a la gente y a las familias que lo fueron a acompañar. Estos tipos, para recuperar algo de poder, siembran violencia y caos. Kirchnerismo Nunca Más”.
 
Bullrich compartió su mensaje en redes sociales, donde fue respaldado por el presidente y otros referentes de LLA.El vocero presidencial, Manuel Adorni, también se pronunció, calificando el ataque como “la muestra más fiel del final del kirchnerismo”. En un tono similar, el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, acusó al kirchnerismo de “agitar la calle, prender fuego vehículos, atacar el equilibrio fiscal en el Congreso y desestabilizar el mercado financiero” antes de recurrir a la violencia física contra el presidente.
 
La cuenta oficial de La Libertad Avanza emitió un comunicado asegurando que “no nos van a frenar” y contrastando los logros del gobierno, como la reducción del déficit fiscal y de la inflación, con el “modelo de violencia” del kirchnerismo.Contexto político y electoralEl ataque se produjo en un momento de alta tensión política, a pocos días de las elecciones legislativas provinciales del 7 de septiembre, donde se renovará la mitad de la Legislatura bonaerense y los concejos deliberantes municipales. Lomas de Zamora, un bastión tradicional del peronismo liderado por el intendente Federico Otermín, es un distrito clave en la Tercera Sección Electoral, donde La Libertad Avanza busca consolidar su base electoral tras el éxito de Milei en la provincia durante las elecciones nacionales de 2023, cuando se impuso en 108 de los 135 municipios bonaerenses.
 
Mientras La Libertad Avanza apuesta por la figura de Milei para traccionar votos en los comicios locales y nacionales, el kirchnerismo, liderado por Kicillof, busca capitalizar el descontento con las políticas de ajuste del gobierno nacional y las recientes denuncias de corrupción que afectan al entorno presidencial.
 
El oficialismo ha insistido en que este tipo de incidentes no detendrá su campaña, con Milei programando nuevos actos en distritos clave como Moreno, en la Primera Sección Electoral, hasta el cierre de la campaña. Por su parte, el kirchnerismo ha optado por mantenerse al margen de las acusaciones directas, enfocándose en temas como la salud y el rechazo a las políticas de ajuste, mientras cuestiona la veracidad de las imputaciones en su contra.
 
A medida que se acercan las elecciones, el episodio de Lomas de Zamora se suma a una serie de enfrentamientos entre oficialismo y oposición, como los ocurridos recientemente en Junín, donde militantes libertarios denunciaron agresiones por parte de sectores peronistas. Estos eventos refuerzan la narrativa de una campaña marcada por la confrontación, con el oficialismo buscando consolidar su discurso anti-kirchnerista y la oposición intentando desmarcarse de las acusaciones mientras capitaliza los escándalos que afectan al gobierno.
 
La investigación sobre el ataque continúa, con las autoridades trabajando para identificar a los responsables y determinar si existió una organización previa detrás de los hechos. Mientras tanto, la polarización política se intensifica, y las urnas del 7 de septiembre y el 26 de octubre serán el escenario donde se medirán las fuerzas de ambos sectores en una contienda que promete ser decisiva para el futuro político de Argentina.

Redacción