El Gobierno nacional ha emitido una advertencia clara a los gobernadores provinciales: aquellos que no congelen su gasto público enfrentarán el corte de fondos discrecionales y la denegación de permisos para endeudamiento.
Esta medida se enmarca en uno de los compromisos clave del Pacto de Mayo, que busca reducir el peso del gasto público total —incluyendo Nación, provincias y municipios— del actual 32% del PBI a un objetivo del 25%.
Según cálculos oficiales, este año el gasto ha aumentado un punto porcentual respecto a 2024, impulsado principalmente por las erogaciones provinciales que superaron con creces el ritmo de los ingresos.
Deterioro en las Cuentas Provinciales
Un reciente informe de la consultora Equilibra revela que todas las provincias experimentaron un deterioro fiscal durante 2025 debido a un fuerte incremento en el gasto, que no fue compensado por los recursos disponibles.
Particularmente alarmante es el caso de ocho provincias que en 2024 mantenían equilibrio o superávit, pero que este año cayeron en déficit: Chubut, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Chaco, Santa Cruz, Tucumán y Tierra del Fuego.
Este desbalance agrava la necesidad de disciplina fiscal y refuerza la postura del Ejecutivo central, que ya ha limitado los Aportes del Tesoro Nacional a solo una fracción de lo presupuestado, distribuyendo apenas el 15% de los fondos asignados hasta la fecha.
La estrategia busca estabilizar la macroeconomía argentina en un contexto de recuperación parcial tras el ajuste inicial, priorizando la sostenibilidad a largo plazo sobre el gasto expansivo que caracterizó años previos.
El Gobierno nacional ha advertido a los gobernadores que cortará fondos discrecionales y permisos de deuda a quienes no congelen su gasto, alineándose con el Pacto de Mayo para reducir el gasto público del 32% al 25% del PBI.
