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3-septiembre-2025 HOY

Por culpa de las medidas gremiales, los vuelos tuvieron un pésimo desempeño en agosto

Se registraron los niveles más altos de reprogramaciones y cancelaciones debido a la constante conflictiva de los sindicatos
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El sistema aerocomercial argentino enfrentó en agosto uno de los peores meses del año en términos de puntualidad y cancelaciones, según un informe de la consultora Adventus. La caída en el rendimiento, con una puntualidad promedio del 76,9%, se atribuye principalmente a las medidas de fuerza impulsadas por la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA), en el marco de un conflicto salarial con la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA). Estas interrupciones afectaron a miles de pasajeros y generaron un impacto significativo en las operaciones de las principales aerolíneas del país.
 
El reporte detalla que el 19,8% de los vuelos en Argentina sufrieron demoras y un 3,3% fueron cancelados, consolidando un retroceso respecto a los primeros meses del año, cuando la puntualidad alcanzó el 82,9% en enero. Entre las aerolíneas más afectadas, Flybondi registró el peor desempeño, con un 3,8% de demoras superiores a 4 horas, un 1,2% de retrasos de más de 8 horas y un 6,5% de cancelaciones. Aerolíneas Argentinas, por su parte, tuvo un 3,5% de vuelos cancelados, mientras que JetSmart reportó un 3,7%. Entre los casos destacados, el vuelo FO 5090 de Flybondi, que conecta Aeroparque con Posadas, fue señalado como el “vuelo infame” del mes por registrar la mayor demora.
 
El conflicto entre EANA y ATEPSA, que incluyó un cronograma de paros que inicialmente contemplaba cinco jornadas de interrupciones, afectó a cerca de 19.000 pasajeros en un solo día. Aunque finalmente se redujo a tres jornadas tras un acuerdo parcial, los aeropuertos más concurridos, como Aeroparque (78,5% de puntualidad), Mendoza (78,1%), y Ezeiza (75,5%), no lograron superar el 80% de vuelos en horario, reflejando el impacto generalizado. Los aeropuertos de Paraná, Catamarca y San Luis fueron los más afectados, con hasta un 50% de cancelaciones en algunos casos.
 
La normativa vigente (decreto 809/24) establece que, ante demoras superiores a 4 horas, las aerolíneas deben brindar asistencia en comidas, y alojamiento si los retrasos exceden las 8 horas, salvo en casos de fuerza mayor como condiciones meteorológicas o huelgas. Sin embargo, las medidas gremiales han generado críticas de las aerolíneas, que las consideran “irrazonables” y perjudiciales tanto para los pasajeros como para el sector. La Cámara de Líneas Aéreas en Argentina (JURCA) expresó su preocupación por el impacto económico y la interrupción de la conectividad.
 
Mientras el Gobierno busca estabilizar el dólar y fomentar la competitividad, los conflictos gremiales en el sector aéreo representan un obstáculo significativo para garantizar un servicio eficiente y confiable.

Redacción