Sofía, Bulgaria – 01 de septiembre de 2025 | El avión que trasladaba a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, sufrió interferencias en su sistema de GPS durante su aproximación al aeropuerto de Sofía, Bulgaria, en un incidente que las autoridades locales atribuyen a una posible operación de sabotaje electrónico orquestada por Rusia.
El hecho, ocurrido este lunes, generó preocupación en la Unión Europea, que calificó el episodio como un acto de intimidación en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas.
Según fuentes oficiales, las interferencias detectadas en el sistema de navegación del avión obligaron a los pilotos a recurrir a mapas físicos y procedimientos manuales para garantizar un aterrizaje seguro, que se llevó a cabo sin incidentes.
Aunque no se reportaron riesgos inmediatos para la seguridad de Von der Leyen ni de su comitiva, el incidente fue considerado de “gravedad significativa” por las autoridades búlgaras y europeas.
El Gobierno de Bulgaria, a través de su Ministerio de Defensa, señaló que las interferencias en el GPS tienen las características de un ataque de “spoofing” (manipulación de señales), una táctica que ha sido vinculada en el pasado a operaciones rusas en la región del Mar Negro.
Este tipo de interferencias busca desorientar los sistemas de navegación al enviar señales falsas, lo que puede generar confusión en aeronaves o sistemas militares.“Este no es un incidente aislado. Hemos observado un aumento en actividades de este tipo en los últimos meses, y las evidencias preliminares sugieren una posible implicación rusa”, afirmó un portavoz del Ministerio de Defensa búlgaro, quien prefirió mantener el anonimato hasta que concluyan las investigaciones.
La Unión Europea, por su parte, emitió un comunicado condenando el incidente como un “intento deliberado de intimidación” y reafirmó su compromiso con el fortalecimiento de las defensas electrónicas y la ciberseguridad.
El incidente ocurre en un momento de alta sensibilidad diplomática, en medio de la escalada de tensiones entre la UE y Rusia por la guerra en Ucrania y las sanciones impuestas a Moscú.
Von der Leyen, quien se encontraba en Bulgaria para participar en una cumbre regional sobre cooperación energética, no hizo declaraciones directas sobre el hecho, pero fuentes cercanas a la Comisión Europea indicaron que se están evaluando medidas para reforzar la seguridad de los desplazamientos oficiales.
Por el momento, ni Rusia ni sus representantes han emitido comentarios sobre las acusaciones. Las autoridades búlgaras, en coordinación con expertos de la OTAN, han iniciado una investigación para determinar el origen exacto de las interferencias y evaluar posibles vulnerabilidades en los sistemas de navegación aérea de la región.
Este episodio se suma a una serie de incidentes similares reportados en países bálticos y del este de Europa, lo que refuerza las preocupaciones sobre la creciente sofisticación de las tácticas de guerra electrónica atribuidas a actores estatales. La UE ha anunciado que llevará el caso a la próxima reunión del Consejo Europeo para discutir medidas de respuesta coordinada.