Washington, 18 de noviembre de 2025 – El presidente Donald Trump dio una bienvenida espectacular al príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman (MBS), en la Casa Blanca este martes, con un desfile de caballos, sobrevuelo de aviones de combate y una ceremonia que emula un viaje de Estado. Es la primera visita de MBS a EE.UU. en siete años, desde el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en 2018, que lo convirtió en paria internacional. Trump, fiel a su estilo transaccional, busca revitalizar la alianza estratégica pese a críticas por derechos humanos.
Detalles de la Reunión en Curso
- Llegada y Ceremonia: MBS aterrizó en la Base Andrews y fue recibido en el South Lawn por Trump con fanfarria militar, banda de marines y un “Presidential Walk of Fame”. Incluyó un saludo con saludo y apretón de manos, seguido de un almuerzo en la Cabinet Room y una cena de gala negra esta noche.
- Agenda Principal: Las discusiones en el Despacho Oval se centran en:
- Defensa: Trump confirmó la venta de jets F-35 stealth por US$100.000 millones, rompiendo la tradición de preservar la superioridad militar de Israel. Incluye un pacto de seguridad mutua contra Irán.
- Energía y Economía: Estabilización de precios del petróleo, fondo saudí de US$50.000 millones para IA y tech en Silicon Valley (con Elon Musk), y energía nuclear civil para Vision 2030.
- Geopolítica: Presión para que Arabia Saudita se una a los Acuerdos de Abraham con Israel, aunque analistas dudan de avances inmediatos por riesgos internos.
- Invitados Notables: Cristiano Ronaldo, capitán de Al-Nassr (club saudí), asistirá, marcando su regreso a EE.UU. tras una década por un caso legal resuelto en 2023.
Contexto y Controversias
Trump defendió la visita como “un gran día para la paz regional”, ignorando el legado de Khashoggi –atribuido por la CIA a MBS, quien lo negó pero asumió responsabilidad como líder–. La reunión también genera preocupaciones éticas por lazos familiares: Jared Kushner recibió US$2.000 millones de un fondo saudí, y la familia Trump negocia con proyectos como Diriyah. Expertos ven un “baile delicado”: pragmatismo económico sobre principios, con riesgos de bloqueos en el Congreso.
MBS, de 39 años, llega fortalecido por reformas en Vision 2030, buscando rehabilitar su imagen global. La gira continúa con visitas al Pentágono y Nueva York, sellando un “nuevo capítulo” en la relación EE.UU.-Arabia Saudita.