Los mercados financieros argentinos amanecieron con un optimismo renovado este jueves, con bonos soberanos y acciones locales registrando subas significativas en la previa de la apertura bursátil, tras el anuncio del secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, sobre un paquete de apoyo financiero que incluye un swap de dólares para fortalecer las reservas del Banco Central. La señal de Washington, que podría inyectar miles de millones de dólares sin pasar por el Congreso de EE.UU., generó un “efecto contagio” positivo: el riesgo país se desplomó a mínimos semanales y el dólar mayorista operaba en baja, reflejando la confianza creciente en las reformas del gobierno de Javier Milei.
El disparador fue el mensaje de Bessent en redes sociales, emitido al cierre de la reunión bilateral entre Milei y Donald Trump en la ONU el miércoles. “Argentina es un aliado sistémicamente importante de Estados Unidos en América Latina, y el Tesoro está dispuesto a hacer lo que sea necesario dentro de su mandato para apoyar a Argentina”, escribió el funcionario, confirmando un mecanismo de intercambio de divisas que entregará dólares al BCRA a cambio de pesos en una cuenta neoyorquina. Este respaldo, alineado con el “apoyo completo” de Trump a la reelección de Milei, se interpreta como un salvavidas para cubrir vencimientos de deuda por USD 28.000 millones en los próximos 15 meses, en un contexto donde las reservas netas del Central apenas superan los USD 640 millones.
En el mercado de bonos, los ADRs (certificados de acciones argentinas en Wall Street) lideraron el rally preapertura: YPF escaló un 5,2%, Banco Macro un 4,8% y Grupo Financiero Galicia un 4,1%, según datos preliminares de la Bolsa de Nueva York. Los bonos soberanos en dólares, como el AL30 y el GD35, promediaron ganancias del 3,5% en el segmento over-the-counter, con picos del 5% en instrumentos de corto plazo. El índice S&P Merval de acciones locales, en tanto, apuntaba a una apertura alcista del 2,8%, impulsado por papeles energéticos y bancarios. “Es un rebote técnico potenciado por el anuncio; el mercado descuenta que este swap no solo alivia la escasez de dólares, sino que valida la estrategia de Milei ante inversores globales”, analizó Christian Naud, jefe de research de Portfolio Personal Inversiones, en diálogo con LA NACION.
El impacto cambiario fue inmediato y favorable: el dólar mayorista caía un 1,2% a 1.355 pesos en operaciones spot, extendiendo la baja de 106 pesos acumulada en la semana, mientras que el blue informal se hundía a 1.395 pesos, su nivel más bajo en un mes. El riesgo país de JP Morgan, medidor clave de la prima de default, se contrajo 45 puntos básicos a 978 unidades, rozando los 950 intradiarios –el mínimo desde antes de las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre–. “El mensaje de Bessent es una ‘fuerte señal’ que reduce la percepción de riesgo a corto plazo; esperamos que los CDS sigan bajando si se materializa el desembolso”, proyectó un informe de Morgan Stanley, que ya había destacado el potencial alcista de los bonos argentinos en un reporte previo.
Desde el Gobierno, el ministro de Economía, Luis Caputo, celebró el momentum en X: “¡El apoyo de nuestros aliados en Washington confirma que Argentina está en el camino correcto! Estos dólares no solo pagan deudas, sino que impulsan el crecimiento”. El anuncio se suma a los paquetes recientes del BID (USD 3.900 millones este año) y el Banco Mundial (USD 4.000 millones acelerados), configurando un “front loading” multilateral que podría elevar las reservas brutas del BCRA por encima de los USD 40.000 millones en octubre.
Analistas coinciden en que este rally podría extenderse si el FMI confirma la octava revisión del acuerdo la próxima semana, tras la reunión de Milei con Kristalina Georgieva en Nueva York. Sin embargo, advierten cautela: “La volatilidad persiste por las tensiones internas, como el pulso por la ley de discapacidad en el Congreso; el verdadero test será post-elecciones del 26 de octubre”, señaló Andrés Reschini, de F2 Soluciones Financieras. En un año de reformas disruptivas, el eco del Tesoro estadounidense resuena como un catalizador: los mercados no solo suben, sino que apuestan a un turnaround sostenido. Por ahora, la previa bursátil pinta de verde, y Wall Street parece alineado con las pampas.