domingo

26-octubre-2025 HOY

Patricia Bullrich tomaría el control de la campaña de La Libertad Avanza

Tras el traspié en Buenos Aires, Patricia Bullrich se posiciona como eje de la campaña de LLA rumbo a octubre
En un giro estratégico que busca rescatar el impulso oficialista ante el recambio legislativo, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich emerge como figura central en la campaña de La Libertad Avanza (LLA) de cara a las elecciones del 26 de octubre. El anuncio llega en el eco del denominado “fracaso bonaerense”, donde el espacio de Javier Milei no logró capitalizar el descontento provincial en las PASO de agosto, quedando relegado en la provincia más poblada del país y complicando sus chances de ampliar bancas en el Congreso.
 
El “fracaso bonaerense” se refiere al magro resultado de LLA en las primarias del distrito, donde los candidatos alineados al oficialismo apenas superaron el 10% de los votos, eclipsados por el peronismo disidente y el radicalismo en un electorado castigado por la inflación y los ajustes. Fuentes cercanas al Gobierno atribuyen el revés a la fragmentación interna y a la falta de una figura de peso local, un vacío que Bullrich –con su trayectoria en el PRO y su rol en el Gabinete mileísta– pretende llenar ahora a nivel nacional. “Patricia no es solo una ministra; es un activo electoral que une el viejo establishment liberal con el nuevo ímpetu libertario”, confió un operador de JxC en off the record, destacando su experiencia en campañas pasadas como la de 2023, donde compitió por la presidencia.
 
Desde el Ministerio de Seguridad, Bullrich ya había demostrado su olfato político al liderar operativos de alto perfil contra el crimen organizado, ganándose aplausos en sectores medios y rurales. Ahora, su agenda se acelera: participará en actos en Córdoba, Santa Fe y Mendoza –bastiones potenciales para LLA–, donde impulsará el mensaje de “mano dura” contra la corrupción y la inseguridad, temas que resuenan en un país con tasas de delincuencia en ascenso. “Vamos a recorrer el interior para mostrar que el cambio no es un eslogan, sino hechos concretos que protegen a las familias”, habría deslizado en reuniones internas, según fuentes del entorno presidencial.
 
El rol de Bullrich no es casual en un contexto donde LLA, con solo 38 diputados y 7 senadores, depende de alianzas frágiles para aprobar su agenda de reformas. Las elecciones de octubre renovarán 127 bancas en Diputados y 24 en el Senado, y un buen desempeño podría otorgar al oficialismo quórum propio o al menos mayor influencia en comisiones clave. Sin embargo, encuestas preliminares de la consultora Opinaia muestran a LLA estancada en el 25% nacional, por debajo de Unión por la Patria (35%) y un JxC fragmentado (20%). El Gobierno apuesta a que la ministra, con su perfil combativo y carisma televisivo, logre movilizar al voto joven y al desencantado, similar a cómo lo hizo en 2019 con el PRO.
 
Con el reloj electoral en cuenta regresiva, Bullrich se convierte en el rostro visible de un oficialismo que no puede permitirse más tropiezos. ¿Logrará la ministra transformar su experiencia en votos para LLA, o el fantasma bonaerense la perseguirá hasta las urnas? En la política argentina, donde las alianzas son tan volátiles como el dólar, octubre podría redefinir no solo el mapa del Congreso, sino el futuro del mileísmo en el poder.

Redacción