Varsovia, 18 de noviembre de 2025 – Polonia ha elevado la tensión con Rusia al acusar directamente a sus servicios de inteligencia de orquestar un sabotaje en la infraestructura ferroviaria clave para el apoyo a Ucrania. El primer ministro Donald Tusk identificó a dos ciudadanos ucranios reclutados por Moscú como autores materiales, en un acto calificado como “terrorista” que buscaba provocar un desastre masivo.
Detalles del Incidente
El sabotaje ocurrió el fin de semana en la línea Varsovia-Lublin, vital para 115 trenes diarios y envíos de suministros militares a Ucrania. Los daños incluyeron una explosión en un tramo de vía en Mika (100 km al sudeste de Varsovia), 60 metros de líneas eléctricas destruidas y una abrazadera metálica sobre los raíles. “El acto fue intencionado y su objetivo era provocar un desastre ferroviario”, declaró Tusk ante el Sejm.
La evidencia apunta a un ucranio condenado en mayo de 2025 en Lviv por sabotajes en Ucrania (residente en Bielorrusia) y otro del Donbás, quien entró a Polonia desde Bielorrusia este otoño. Ambos huyeron a Bielorrusia vía Terespol tras el ataque, grabados en cámaras de seguridad. El Ministerio de Servicios Especiales polaco afirma: “Todo indica que han sido los servicios de inteligencia rusos”. La Fiscalía Nacional lo investiga como “actos de sabotaje terrorista en beneficio de servicios extranjeros”.
Respuestas y Escalada
Tusk elevó la alerta ferroviaria de nivel 2 a 3 (de 4) y ordenó al Ministerio de Exteriores pedir extradiciones a Rusia y Bielorrusia. El ministro de Defensa, Władysław Kosiniak-Kamysz, lo describió como “sin precedentes” y parte de acciones híbridas rusas en la “zona gris” entre guerra y paz. El jefe del Estado Mayor, general Wiesław Kukula, advirtió: “El adversario se está preparando para la guerra” y crea condiciones para agresión en Polonia.
Rusia rechazó las acusaciones: el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, lamentó que “se acusa a Rusia de todas las manifestaciones de la guerra híbrida” y culpó a la “rusofobia floreciente” en Polonia. Analistas como Konrad Muzyka (Rochan Consulting) ven estos incidentes como recurrentes desde antes de la invasión a Ucrania, aunque refuerzan la necesidad de cautela en la UE y OTAN: “Cautelosos, pero sin miedo; humildes, pero fuertes”.
Implicaciones Geopolíticas
Este caso intensifica las preocupaciones por la guerra híbrida rusa contra Occidente, afectando infraestructura crítica en el flanco este de la OTAN. Polonia urge a aliados a contrarrestar sabotajes, desinformación y migración como armas. Mientras, el Sejm debate medidas de seguridad adicionales, en un contexto de divisiones internas que, según expertos, no necesitan ayuda rusa para manifestarse.
