domingo

26-octubre-2025 HOY

“Fuerte señal” de Wall Street

Morgan Stanley ve alivio en la deuda argentina por apoyo de EE.UU. y destaca el potencial alcista de los bonos soberanos
En un informe que inyecta optimismo a los mercados emergentes, Morgan Stanley, uno de los gigantes de Wall Street, analizó el reciente respaldo de Estados Unidos a la gestión de Javier Milei como una “fuerte señal” que podría aliviar la presión sobre la deuda argentina en 2026. Según el reporte, un posible préstamo de hasta USD 10.000 millones desde Washington –posiblemente canalizado a través de un fondo soberano latinoamericano o una nueva emisión de bonos– reduciría drásticamente el riesgo de default a corto plazo, impulsando el rendimiento de los bonos soberanos y bajando los costos de cobertura crediticia. Sin embargo, el banco advierte que persisten desafíos fiscales a mediano plazo, especialmente de cara a las elecciones presidenciales de 2027.
 
El análisis de Morgan Stanley llega en el contexto de la reunión entre el presidente Donald Trump y su par argentino en Nueva York, durante la Asamblea General de la ONU, donde se reafirmó el “apoyo completo” de Washington a las reformas de Milei. Este espaldarazo geopolítico ya se traduce en movimientos positivos en los mercados: los bonos soberanos en dólares registraron subas de hasta el 6% en la semana, mientras que los credit default swaps (CDS) –que miden el riesgo de impago– cayeron en los plazos cortos de seis meses a un año, reflejando una menor prima de riesgo. “El anuncio de apoyo de Estados Unidos es significativo”, destaca el informe, al considerar que podría estabilizar las reservas internacionales del Banco Central (BCRA), actualmente en apenas USD 640 millones netos, frente a vencimientos de deuda externa por USD 12.000 millones en 2026.
 
La deuda argentina, reestructurada en 2020, presenta una composición vulnerable: el 68% de los bonos bajo ley extranjera está en manos de inversores internacionales, lo que amplifica la sensibilidad a shocks globales. Aunque los bonos bajo ley local –pagaderos en divisas– han ganado tracción doméstica en 2024, ofreciendo cierto soporte a los precios, el informe enfatiza que el flujo neto del FMI se volverá negativo el próximo año: de USD 14.000 millones en desembolsos para 2025, pasaría a solo USD 1.900 millones en 2026, con pagos netos de USD 2.600 millones. En contrapartida, los organismos multilaterales como el BID y el Banco Mundial podrían aportar flujos netos positivos de USD 5.000 millones anuales desde 2026, gracias a los paquetes de financiamiento acelerados anunciados recientemente.
 
Morgan Stanley proyecta que este “front loading” de apoyo externo –similar al de USD 4.000 millones del Banco Mundial y USD 3.900 millones del BID para este año– podría cubrir los pagos de 2026 sin necesidad de acceso al mercado, un escenario clave para restaurar la confianza de los inversores. “Debería mejorar la liquidez de cara a 2026, el primer motor clave para los mercados”, afirma el reporte, al tiempo que nota una “curva de riesgo empinada” en los bonos, con mayor optimismo para vencimientos hasta 2026 y cautela para 2027-2028, influida por la incertidumbre electoral. La probabilidad de default en 2026 ha disminuido, pero los riesgos fiscales post-elecciones –como la sostenibilidad del ajuste y la continuidad de las reformas– mantienen elevados los CDS a largo plazo.
 
El informe no se detiene en recomendaciones: Morgan Stanley califica los bonos argentinos como una oportunidad de alto potencial para inversores tolerantes al riesgo, especialmente en instrumentos de corto plazo, donde el upside podría superar el 20% si se materializa el préstamo estadounidense. Fuentes de la Casa Rosada celebraron el análisis como una validación de la estrategia económica, con el ministro de Economía, Luis Caputo, destacando en redes: “Wall Street ve lo que nosotros sabemos: el camino de las reformas atrae capital y alivia presiones”. Por su parte, analistas locales como los de Cohen Securities coinciden en que este momentum podría extenderse si se evitan fricciones con el Congreso, aunque advierten sobre la volatilidad si no se resuelven los vencimientos de mediano plazo.
 
En un panorama global de tasas altas y tensiones comerciales, el respaldo de Morgan Stanley posiciona a Argentina como un “caso de estudio” en turnaround emergente. Mientras los bonos Globales como el AL29 acumulan ganancias semanales del 6,8%, el mercado espera precisiones sobre el préstamo de EE.UU. Por ahora, el mensaje de Wall Street es claro: el alivio está a la vista, pero la consolidación de las reformas será el verdadero catalizador para un rally sostenido en los bonos argentinos.

Redacción