Buenos Aires. — El nuevo embajador de Estados Unidos en Argentina, Peter Lamelas, aterrizó hoy en el país para presentar sus cartas credenciales en los próximos días, marcando el inicio de una misión diplomática enfocada en contener la “influencia maligna” de China y otros regímenes autoritarios en la región. Médico, empresario y cubano-americano, Lamelas llega con el respaldo del presidente Donald Trump y una agenda clara: fortalecer los lazos entre Washington y Buenos Aires como un “ejemplo brillante” para América Latina, según expresó durante su audiencia de confirmación en el Senado de EE.UU. en julio.
Lamelas, quien prestó juramento como embajador en las últimas semanas, tiene entre sus prioridades contrarrestar la presencia de potencias como China, Cuba, Venezuela, Nicaragua e Irán, a las que calificó como “actores maliciosos” que buscan “socavar los valores democráticos”. “De ser confirmado, me mantendré firme contra esta influencia maligna en la región”, afirmó, alineándose con la visión de Trump de una América Latina libre de injerencias externas.
Su llegada coincide con un momento de acercamiento entre Argentina, bajo el gobierno de Javier Milei, y Estados Unidos, fortalecido por la afinidad ideológica entre ambos líderes.
El embajador, que emigró de Cuba con su familia en busca del “sueño americano” y fundó MD Now Urgent Care en Florida, trae una perspectiva personal a su rol. Durante su audiencia, destacó el “muy buen vínculo” entre Trump y Milei, sugiriendo que esta relación podría servir como modelo para la región.
El gobierno argentino recibió con optimismo la llegada de Lamelas, viéndolo como un aliado en su apuesta por la libertad económica y el alineamiento con Occidente. Sin embargo, sectores opositores ya alertan sobre los riesgos de una política exterior que priorice a EE.UU. sobre otros socios históricos. Con su experiencia en medicina y gestión, Lamelas promete un enfoque pragmático, pero su misión de limitar a China pondrá a prueba la diplomacia bilateral en los meses venideros.